Benedicto XVI seguirá llamándose Su Santidad y tendrá el título de 'papa emérito' o 'Romano Pontífice emérito', vestirá sotana blanca, sin esclavina, y calzará zapatos marrones.
Benedicto XVI permanecerá en Castel Gandolfo hasta que acaben las obras de restauración del convento de monjas de clausura de dentro del Vaticano, donde vivirá los próximos dos meses.
Ratzinger se lleva a Castel Gandolfo documentos y apuntes privados, mientras que los del pontificado y los de la época en que fue prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe quedarán en el Vaticano para ser archivados.
Reconoce que tuvo "momentos difíciles" en su papado / Celebró su última audiencia papal en la plaza de San Pedro donde se congregaron miles de fieles / La ceremonia fue el último acto multitudinario del actual sumo pontífice, que mañana (jueves) dejará de ser Papa
Benedicto XVI se dirigió en varios idiomas este jueves en lo que fue su última audiencia papal en la Plaza de San Pedro y -en su mensaje de despedida- dijo en español que agradecía “a todos el respeto y la comprensión” con la que han acogido su renuncia, que aseguró ha realizado “con plena libertad”.
Afirmó que mientras estuvo en el trono papal tuvo momentos de alegría pero también "momentos difíciles", aunque siempre se ha sentido guiado y protegido por Dios.
Asimismo, indicó que "amar a la Iglesia significa también tener la valentía de tomar decisiones difíciles, teniendo siempre presente el bien de la Iglesia y no el de uno mismo".
A las 09:30 GMT recorrió en su papamóvil la plaza de San Pedro del Vaticano para saludar a los fieles justo antes de celebrar la audiencia. Al lugar asistieron más de 150.000 fieles de todo el mundo que empezaron a congregarse desde tempranas horas de la mañana.
Benedicto XVI —quien durante casi ocho años ha sido obispo de la ciudad eterna— escuchaba cómo miles de peregrinos coreaban su nombre mientras ondeaban banderas de numerosos países y lemas de apoyo y agradecimiento. "Gracias de corazón. Estoy realmente conmovido y veo a la Iglesia viva", dijo el sumo pontífice minutos más tarde.
Este jueves 28 de febrero el sumo pontífice se reunirá por la tarde con los cardenales en la Sala Clementina del Vaticano y a las 19:00 GMT dejará de ser Papa y se abrirá la llamada sede vacante, el tiempo que transcurre desde la muerte o renuncia de un Papa hasta la elección del siguiente.
A las 09:30 GMT recorrió en su papamóvil la plaza de San Pedro del Vaticano para saludar a los fieles justo antes de celebrar la audiencia. Al lugar asistieron más de 150.000 fieles de todo el mundo que empezaron a congregarse desde tempranas horas de la mañana.
Benedicto XVI —quien durante casi ocho años ha sido obispo de la ciudad eterna— escuchaba cómo miles de peregrinos coreaban su nombre mientras ondeaban banderas de numerosos países y lemas de apoyo y agradecimiento. "Gracias de corazón. Estoy realmente conmovido y veo a la Iglesia viva", dijo el sumo pontífice minutos más tarde.
Este jueves 28 de febrero el sumo pontífice se reunirá por la tarde con los cardenales en la Sala Clementina del Vaticano y a las 19:00 GMT dejará de ser Papa y se abrirá la llamada sede vacante, el tiempo que transcurre desde la muerte o renuncia de un Papa hasta la elección del siguiente.
Benedicto XVI confesó el pasado 11 de febrero que no tiene fuerzas para ejercer adecuadamente el ministerio petrino, por lo que decidió dimitir a su cargo de máxima autoridad de la Iglesia católica. La última vez que se produjo una renuncia al trono papal fue en 1415. El código canónico estipula que el sumo pontífice puede dimitir sin necesidad de aprobación alguna, la única condición es su libre voluntad.
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